Cecilia Ulla

1-¿Dónde escribís?

En mi casa, en el living-comedor o en el balcón-jardín, desde ambos lugares que son casi el mismo tengo una vista despejada a los atardeceres. Si llego a escribir fuera de casa de seguro es en un lugar muy calmo.

2- ¿Trabajás en computadora o a mano?

Escribo en papelitos sueltos y en mi cuaderno del momento. Finalmente lo copio en la computadora. He hecho eso el último tiempo… De la computadora me gusta la velocidad con la que puedo escribir, a mano no logro hacerlo tan rápido y algunas palabras se me escapan por eso. Sin embargo, no me acostumbro. Una vez escribí en un procesador de texto para mac, una cosa maravillosa… la pantalla totalmente despejada era un papel color amarillento, el cursor no se veía, no titilaba, a medida que escribías se escuchaba un sutil sonido a lluvia que se intensificaba con la velocidad de escritura… y cantaban pajaritos creo. Escribimos unos versos a cuatro manos con Diego, el dueño de esa compu, probando las opciones de menú.

3- ¿Escribís todos los días? ¿Tenés un horario fijo?

Escribo poco y breve. Las ideas pasan mucho tiempo en mi cabeza en el aire en papelitos. Me gustaría hacer una experiencia de escritura más disciplinada en algún momento. Ahora es medio aleatorio, aparentemente.

4-¿Cuánto tiempo le dedicás?

Como decía recién, escribo poco pero ese acto tiene toda mi entrega y dedicación. En los demás momentos trato de estar lo más posible a la escucha de las cosas y los seres, que es para mí el comienzo de la escritura.

5- ¿Algún ritual, costumbre o manía a la hora de sentarse a escribir?

La atmósfera sonora es muy importante para mí, si estoy en casa elijo música (a veces para cubrir los ruidos propios de un edificio de papel como en el que vivo, sin metáfora), si estoy afuera debe ser un lugar muy tranquilo y natural. No puedo escribir en bares por ejemplo, donde haya gente o bullicio.

6- ¿Cuándo das por terminado un texto? ¿Qué recorrido emprende ese texto?

Ahhh no sé. Es una intuición. Yo siento los ruidos del poema. No estudié letras, desconozco la técnica, entonces a veces no me doy cuenta qué es, pero escucho dónde está. Y me quedo ahí viendo qué pasa… leo mucho en voz alta, releo. Si no logro resolver pido ayuda, se lo muestro a poetas que conozco, les digo: opiname el poema, tallerealo. En algún momento los ruidos se van. Ahí digamos que lo hago público (en lecturas, en alguna publicación, en alguna performance que hago). Y si bien, no muestro poemas en proceso, algunos poemas que mostré o publiqué han variado, les he hecho pequeñas modificaciones… uno puede sentir que está terminado, pero si el poema aún tiene que mutar, lo hará en algún momento. 

7- ¿Qué relación tenés con tu biblioteca? 

No imagino mi hogar sin biblioteca, me gustan los libros en papel más que virtuales, porque mientras leo hago dibujos en los márgenes, escribo palabras, los intervengo… me gusta hacer eso, y releer el libro a través de mis marcas también, releo mucho, por eso me gusta tenerlos a mano y porque tengo mala memoria; y siempre serán pocos, hasta que me desapegue de ellos.

8- ¿Qué libro te gustaría leer?

Ahora: la obra de Bo Carpelan, un poeta finlandés. El último de Carlos Ríos.

9- ¿Qué cinco libros no pueden faltar en tu biblioteca ideal?

Si es ideal no puede faltar ninguno que quisiera.

10- ¿Cuáles son los autores/libros que te parecen más sobrevalorados y cuáles los menos valorados?

No podría decirte porque el “punto de equilibrio” (el de valor “justo”) con el cual comparar, es personal y cambiante. La valoración se crea en una dimensión personal muy ligada a la experiencia, a la acumulación de vivencias, entonces es probable que si tu experiencia es compartida con un grupo de personas (y esto no significa que hayan hecho lo mismo o juntos) algunos autores resuenen más que otros, y si cambias de grupo hay otros autores que están siendo considerados especialmente, leídos y releídos con atención y si dejas pasar un tiempo, todo cambia otra vez. Es natural, cada obra tiene sus tiempo-espacios de recepción.

11- ¿Qué relación tenés con la inspiración?

Creo que el amor es la inspiración de todo. Me tratan de “naif” cuando digo cosas así… pero mirá, cuando estás inspirado el hacer fluye, escribís cinco, diez, veinte carillas, no parás… o empezás a pintar una pared y terminas todo el ambiente, o limpiás la pileta y resulta que ya que estás cortás el pasto y podas, o te ponés a cocinar y con lo que parecía que no era nada hiciste un plato super rico, así… y además hay alegría, hay goce. Qué otra cosa que el amor puede pulsar algo así? Yo busco esos estados de fluidez, una actitud de bondad que empieza antes del pensamiento y que no podría explicar... y que aprendo de personas que viven de modo muy amoroso (en su pensar, en su hacer, en su decir…) con ellos y con el mundo, son inspiradores y manifiestan la inspiración en la cotidianidad.

12- ¿Cuándo una persona se convierte en un buen lector?

Cuando está atenta y sin prejuicios. Son momentos.

Bonus Track:
-Experiencias e impresiones de escribir estimulado por alguna sustancia o en un estado de conciencia alterado.

Me parece importante el vínculo que uno establece con lo que consume, yo no utilizo las sustancias como estimulantes. Hago uso recreativo de cannabis, me gusta el estado de apertura y sensibilidad que me provoca, no me induce ni me impide escribir, y he tenido experiencias con enteógenos/psicodélicos que han sido bellas,  reveladoras, sanadoras, que a veces me han inducido y otras impedido escribir bajo el efecto de la sustancia, todo eso de algún modo está en mi escritura porque es mi vivencia, porque me ha transformado, no por ser estímulo para escribir.




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