1-¿Dónde escribís?
Desde que uso notebook escribo en cualquier lado. No tengo un
espacio fetiche. A veces escribo en un bar, a veces en mi estudio, a veces en
el comedor de mi casa. Si hace mucho frío en la cocina, al lado de las
hornallas.
2- ¿Trabajás en computadora o a mano?
Cuando la inspiración me agarra aprovecho lo que tengo a
mano. Si lo que tengo a mano es papel y lapiz voy con eso; si lo que tengo a
mano es una computadora voy con computadora; y si me encontrara en una isla
desierta probablemente escribiría sobre las rocas son alguna piedra afilada.
Como decía antes, no soy fetichista.
3- ¿Escribís todos los días? ¿Tenés un horario fijo?
Escribo solo cuando surge la necesidad de hacerlo (sea
espiritual o sea económica). No me gustan los escritores de oficio o esos que
hacen un régimen de escritura. Me parece algo forzado. Puedo escribir una
novela encerrado cinco días seguidos o tomarme cinco años para escribir un
haiku.
4-¿Cuánto tiempo le dedicás?
El que sea necesario pero tampoco tanto. No me gusta
permanecer detenido en un mismo lugar. Necesito avanzar y hacer algo nuevo.
Entonces si la cosa se demora la dejo ahí y paso a la siguiente. Por eso mismo no me he detenido ni en el cine
ni en la música ni en la literatura. Cuando cambia la luna, yo cambio.
5- ¿Algún ritual, costumbre o manía a la hora de sentarse a escribir?
A veces hago una pequeña invocación a Hermes antes de
escribir.
6- ¿Cuándo das por terminado un texto? ¿Qué recorrido emprende ese texto?
El texto está acabado cuando me aburro de corregirlo o cuando
me olvido que existe.
El recorrido es muy azaroso. Por lo general escribo para la
web. Me gusta el inmediatismo de la red, no tengo obsesión por el papel
impreso. Hasta el momento he publicado un solo libro –ZintoniZado
No-ZintoniZado- y en algunas revistas pero me interesa más que me lean antes de
que corten árboles para publicarme. En la web tengo una respuesta casi
inmediata y llego a muchos más lugares que en una publicación urderground. La
gente me manda mails o me habla por chat. Me comentan mis textos, a veces me
envían los suyos, se genera un feedback. A veces inclusive alguien me invita a
tomar una cerveza, caminamos y charlamos hasta el amanecer. Eso es lo que me
interesa generar porque son cambios reales y no ejercicios de vanidad.
7- ¿Qué relación tenés con tu biblioteca?
Me
he mudado de casa muchas veces, desde chico, así que he aprendido a ser
bastante desapegado. Tampoco soy un gran lector. Leo lentamente y tengo tendencia
a releer una y otra vez los mismos cuatro o cinco libros. También creo
firmemente en la Ley
de Sturgeon que dice que el 99% de los libros son una mierda, por lo que solo
guardo ese 1% y te imaginarás que mi biblioteca es muy pequeña. No me siento
bien con la acumulación. A veces los libros los regalo a quienes considero que
los pueden apreciar. A veces los vendo cuando necesito algo de efectivo.
Intento conservar algunos títulos que se que están descatalogados o son muy
difíciles de conseguir y en especial los libros de ocultismo que para mi son de
consulta permanente por mis estudios del tema. A veces veo que me estoy
quedando sin espacio en los estantes y eso significa que algo está funcionando
mal. Uno de estos días quisiera organizar una quema pública de libros. Una gran
fogata debe ser lo suficientemente mágico y escandalizar a mucha gente, pero
bueno, pienso que se han talado muchos árboles para imprimir tanta basura…
8- ¿Qué libro te gustaría leer?
Me
gustaría leer muchisimos libros. Me gustaría leer mucho más de lo que leo, pero
como decía antes, no soy un lector voraz. Leo lento y en mis espacios libres,
entre mis estudios ocultos, mi trabajo como cineasta y mi vida de padre de
niñas pequeñas. Aún tengo pendientes varios libros de mi admirado Robert Antón
Wilson –la triología de El Gato de Schoerdinger por ejemplo- algunos de Phillip
K Dick, los últimos dos libros de la saga de Jerry Cornelius de Michael
Moorcock que nunca se publicaron por estas tierras y el Ulysses de Joyce del que
nunca supero las primeras páginas y aún así la considero una obra importante.
9- ¿Qué cinco libros no pueden faltar en tu biblioteca ideal?
Podrían faltar todos menos mis libros de estudio, pero si me
fuera mañana de viaje a la Luna
me llevaría estos cinco en la mochila:
1. Sivainvi de Phillip K Dick
2. El Programa Final de Michael Moorcock
3. El Almuerzo Desnudo de William Bourroughs
4. Illuminatus! De Wilson & Shea
5. La saga de Tchai de Jacke Vance
10- ¿Cuáles son los autores/libros que te parecen más sobrevalorados y cuáles los menos valorados?
Sobrevalorados no sabría decir. Realmente no estoy a la
vanguardia literaria y no sé que es lo que se lee. Antes la ciencia ficción
estaba muy infravalorada pero actualmente la cosa parece haber cambiado. Hace poco
participé en un congreso de ciencia ficción organizado por la facultad de
Filosofía y Letras, así que pareciera que ya no es tan considerado un género
menor como antaño, en tanto que está permeando los círculos académicos, pero
realmente no lo sé, vivo adentro de una cápsula espacio-temporal.
11- ¿Qué relación tenés con la inspiración?
Hay un lugar común que es que la inspiración y por derivación
la creación está relacionada con el sufrimiento. Esto en algún tiempo creía que
debía ser así pero últimamente cambié radicalmente de postura. El universo está dentro de la mente de cada uno así que solamente hay que encontrar las puertas
correctas y abrirlas. Tuve una “revelación” cuando escribí mi micro-nouvelle “La Conspiración de
Ouranos” después de haber realizado un contacto astral con una entidad
extraterrestre. Por supuesto, no se trata de un extraterrestre de esos que
viajan en platos voladores ni secuestran granjeros o mutilan ganado. Cuando
hablo de entidades extraterrestres hablo de formas de consciencia –de nuestra
propia consciencia- que son virtualmente inaccesibles en un estado de vigilia y
que definitivamente no son de este mundo. Digamos que a través de ciertas
prácticas ocultas logré contactar con una musa alienígena. Entonces cuando no
sé que escribir simplemente vacío mi mente, conjuro el nombre de este ser de mi
subconsciente y dejo que la mano fluya sola.
12- ¿Cuándo una persona se convierte en un buen lector?
Cuando deja de leer lo que le dicen los demás y lo que se
supone que debe leer y lee solamente aquello que le da la gana.
Bonus Track:
-Experiencias e impresiones de escribir
estimulado por alguna sustancia o en un estado de conciencia alterado.
Probé varias drogas y nunca saque un mayor provecho de eso -al menos hablando de escribir-. En un tiempo abusé de la cocaína y produje un
puñado de buenos textos pero nada más.
Creo que el estado alterado de conciencia es -a la hora de
escribir- permanente. Uno simplemente se deja arrastrar por el multiverso
mental. El escritor que no entra en otra
estado de conciencia mientras escribe probablemente no esté haciendo literatura
sino un manual de instrucciones.
En mi caso particular, por lo que conté antes, utilizo mucho
la escritura automática, así que lo que busco siempre es un estado alterado-alterado.
¿Nos mostrás tu biblioteca y tu lugar de trabajo?
¿Nos mostrás tu biblioteca y tu lugar de trabajo?
Por qué no hablás de todos los amigos a quienes estafaste, de la plata que robaste haciéndote el pobrecito, el artista incomprendido, de que te cagabas en el "arte" y después mendigabas prensa,de que lo primero que te fijabas de las mujeres que iban a trabajar con vos era si estaban buenas o eran "escrachos", de cómo cagabas a tu mujer, del maltrato emocional a mujeres, del abuso y el acoso, de las personas a quienes defraudaste, porque tenés mil caras y todas son falsas. Sos una mentira, un misógino asqueroso y un mediocre caradura.
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